Consagración a María



Querida y tierna Madre mía, María, ampárame; cuida de mi inteligencia, de mi corazón, de mis sentidos, para que nunca cometa el pecado.
Santifica mis pensamientos, afectos, palabras y acciones, para que pueda agradarte a Tí y a tu Jesús y Dios mío, y contigo llegue al Paraíso.
Jesús y María, dadme vuestra santa bendición En el nombre del Padre, y del Hijo y del Espíritu Santo.

Amén.



Inviata da:
Julie Rodriguez